PRIVATE EQUITY y la Teoría del tonto último. II

     Que la mayoría de los conflictos vienen provocados por un management inquieto es algo ya tan manido que hasta dá vergüenza hablar de ello. El abogado vive del litigio como el médico de la enfermedad. Para el economista, el crimen más tentador es la estafa, decía Galbraith, en su libro sobre la crisis del 29, tan actual.  Si en todo conflicto hay una parte repercutida y ejecutada hay otra que sale ascendida y ejecutiva, como ángeles querubines, pues claro, una vez provocado el conflicto se hacen necesarios, y el papeleo dura y dura. Los sindicatos van como diez o quince años de retraso sobre el pensamiento financiero, el máster en Pamplona es listo, mucho más listo, pero el accionista, que es el dueño, no es tonto, aunque su papel se reduzca a dar un sopapo por aquí y por allá, pegar con el bastón en la mesa. La dirección se ha hecho necesaria, es decir burocracia, y en el consejo sólo surgen los nervios cuando hay que aportar fondos, un Valdepeñas en navidad es síntoma de declive, y mira que está bueno.

     Soy el tonto último y además he contribuido a ese espantoso dato de acumulación de la deuda privada en España con la compra de mi vivienda, yo confiaba en mi empresa tampoco iba a pensar que me iba a ir al paro, las dosis de ingeniudad en un poeta son preocupantes, la deuda privada sumada a la pública es nuestro talón cosido por el posible rescate, que si no viene de una puta vez se lo van a gastar los griegos y los portugueses. Portugal al menos invierte en I+D, cuando comencé este blog íbamos por detrás de Chipre. Nuestra amada Grecia, cuna de nuestra civilización, tumba de Byron, ha regresado al siglo XX y los manifestantes desfilan con el paso de la oca para acojonar a Europa y el Occidente. 

    He leído tres cosas sobre ese fenómeno financiero que me ha llevado al paro: el Private Equity y que por lo visto hizo muy rico al candidato republicano de los Estados Unidos, pero ganó Obama, gran orador y magnífico storytelling.

     Sobre la democracia americana siempre me llamó la atención que un padre y su hijo, los Bush, puedan ser ambos presidentes; Clinton y su parienta, Hilary, a punto de serlo, eso en Francia jamás pasaría por el principio republicano de la igualdad de oportunidades, en España tampoco, como mucho Presidente y alcaldesa en el ejemplo de los Aznar.

el Beni poeta y humanista.